Los frutos secos se caracterizan por ser un alimento rico en grasas saludables, proteínas con un alto valor biológico, y fibra alimentaria. Son alimentos que nos aportan muchos nutrientes, por lo que se recomienda incluirlos en nuestras comidas para mantener una dieta saludable y equilibrada. Pero también debemos saber que, al ser ricos en grasas saludables, nos proporcionan un gran aporte calórico. Es ahí donde surge la duda que quizás alguna vez te has planteado: ¿Engordan los frutos secos?

A continuación te explicamos por qué es falsa la creencia de que los frutos secos engordan. Y, no solo eso, sino que también tienen claros beneficios para nuestro organismo.

Desmontamos el falso mito: los frutos secos NO engordan

El Consenso Español de Prevención y Tratamiento de la Obesidad confirma que "incorporar los frutos secos en la dieta habitual no se asocia al aumento de peso", tal y como indica un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition. Al comerlos no se incrementa de peso, entre otras cosas, por su alto contenido en fibra dietética. Ésta hace que disminuya la velocidad del proceso digestivo e incremente la sensación de saciedad. En cambio, se ganan vitaminas, minerales, proteínas y fibra. ¡Son todo beneficios!

Entonces, no solo es que no engorden, sino que se ha probado que pueden ayudar a perder peso, ya que pueden incrementar ligeramente la termogénesis inducida por la dieta; es decir, el gasto energético necesario para metabolizarlos. Además, con su consumo desplazamos el de ultraprocesados insanos que son los que nos hacen"engordar".

¿Hay algún fruto seco que engorde más que otro?

Si te preocupa saber qué fruto seco elegir, cuáles engordan menos si estás tratando de perder peso o simplemente mantenerte, te gustará saber que no importa cuáles consumas. Tanto las almendras, como las nueces, los pistachos, los anacardos, etc. tienen efectos positivos para la salud muy parecidos.

Las personas que consumen frutos secos de forma frecuente son más propensas a seguir una dieta más sana y, en general, un estilo de vida más saludable, como el siguiente:

▪️ Practicar deporte diariamente y/o no tener una vida sedentaria

▪️ Descansar lo suficiente

▪️ No fumar

▪️ No consumir alcohol

Por tanto, introducir estos alimentos como complemento en nuestro desayuno o merienda, o incluso en nuestros platos principales, es una muy buena idea. Este hábito no hará que aumentemos de peso, sino que nos ayudará a controlarlo y a estar más sanos.